3 de julio de 2014. 23:30 h. Mochilas, petates, nervios e
ilusión. Ataviados con ropajes de verano salimos de casa, mientras multitud de
relámpagos iluminan la oscura noche, llueve en la tierra de Sancho el Fuerte.
Por delante 35 horas de viaje para llegar a Kyrgyzstan, tierra de glaciares y de los señores de los caballos, para adentrarnos en
los dominios del Pobeda y el Khan Tengri.
Tras un placentero viaje bajo la lluvia con el señor Conda,
llegamos de madrugada a la Terminal 2, para unirnos al resto de la expedición
que ha viajado en coche desde Pamplona, el ya famoso Raúl el Sarrio de
Bakedano, Susi Kartofen y Julen Sarriostar.
Tras el habitual ritual aeroportuario de pasaportes y controles,
comprar el Jueves, Desnivel y comer una hamburguesa, embarcamos rumbo a
Estambul donde haremos escala hasta las 9 de la noche, momento en el cual
despegamos rumbo a Kyrgyzstan, y como los niños buenos, una película de
superhéroes, cenita y a dormir.
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Next Stop |
Pasadas las 5 de la mañana aterrizamos en Bishkek y tras
recoger los equipajes, descubrimos en la terminal un personaje de corte ruso portando
un cartel en el que podía leerse en letras bien grandes, JORASTUR. El tipo en
cuestión resultó ser Alexander, nuestro guía de montaña... y tras los saludos y
presentaciones de rigor con él, Friechich y Eva, una pareja austriaca que se
habían unido a la fiesta, soltamos la pasta y todos a la furgo...Por delante 7
horas de carretera por el norte del país en dirección a Karakol, durante las
cuales la expedición Astur-Navarra no hizo otra cosa más que dormir entre bache
y bache de la carretera...alguno incluso en una posición inverosímil con la
cabeza incrustada en el respaldo...
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Bishkek Airport |
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La furgo. |
Un par de paradas para vaciar vejigas, pit stop para comer y
tras más de 35 horas de viaje, entre calles sin asfaltar llegamos al muy
recomendable Hotel Green Yard de Karakol, son algo más de las 3 de la tarde
hora local, del sábado 5 de julio.
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A las puertas del Green Yard |
Karakol, con unos 75.000 habitantes y diseño soviético, es una
basta extensión urbanizada con escaso interés turístico o de otro tipo, salvo
como punto de inicio para hacer montaña o esquí. Calles enormes, muchas sin
asfaltar, casas bajas, bloques de hormigón, un burro amarrado a la puerta del
baile, un contenedor de barco que hace las veces de vivienda, cuatro chapas
forman un bar tienda, niños en bicicleta, calor, una cerveza en el peldaño de
entrada a un extraño chiringuito, una oveja, un antiguo instituto tecnológico,
una zona militar, polvo...la hora de cenar.
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Streets of Karakol. |
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Kirguis WRC |
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Cualquier sitio es bueno para una cerveza. |
Antes de cenar nos reunimos con Alex, para concretar los
detalles, chequear el material y puntualizar las etapas sobre plano... todo ok,
dinner is Ready!! Última comida de verdad en muchos días... sopa de verduras,
berenjenas con tomate y mantequilla de ajo, pepino y tomate natural, diferentes
panes, pimientos rellenos, rollitos de cebolla y zanahoria, dulces de anís,
pasteles, helados, fresas, mermeladas caseras y té...todo un festín...Para ser
el primer día no está mal, todas las normas higiénicas rutinarias de agua,
verduras crudas y fruta lavada, saltadas a la torera, Rbkina y Raúl robando
cerezas como en casa güelu...la ruleta de la fortuna versión diarrea ha
comenzado y siete concursantes optan al premio gordo.
Cae la noche en Karakol, el sueño nos vence, el viaje ha
sido duro...y esto no ha hecho más que empezar, la verdadera aventura comienza mañana...cruzaremos ríos, collados, montañas y glaciares, pasaremos calor y frío, soportaremos sol, agua, tormentas y nieve, y nuestras espaldas se quejarán hasta adaptarse al duro y frío suelo de la tienda de campaña...to be continued.
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Water melons. |
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Aquí va a ser complicado entender algo... |
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Blue. |
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Por las huellas soviéticas. |
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Primer contacto con la comida local.
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El que lo entienda para él. |
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Ciclando. |
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¿El panadero? |
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Vigilando la calle. |
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Instituto de Tecnología de Karakol...o eso creo. |
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Artista...de la pista. |
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Las montañas nos aguardan... |
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